Soledad Amena. Edición crítica y digital de la obra poética de Garcilaso de la Vega
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Durante el segundo cuatrienio del proyecto “Garcilaso de la Vega en Italia. Clasicismo horaciano” (2020-2024), nos hemos propuesto editar las obras latinas y castellanas de Garcilaso que participan del horacianismo por el que su autor fue tan alabado en Italia. Este ha sido nuestro principal objetivo: descubrir por qué Pietro Bembo, Girolamo Seripando y Paulo Giovio tuvieron en tan alta estima la actividad poética latina de Garcilaso, una admiración impulsada por el plácet de Bembo a las odas latinas del toledano, que además impulsó su praxis horaciana en castellano, cuya culminación constituye la Ode ad florem Gnidi.
Historia
En el Congreso Internacional “El clasicismo horaciano en el contexto italiano de Garcilaso de la Vega” de PRONAPOLI, que tuvo lugar en Nápoles, en la Università Suor Orsola Benincassa, durante los días 20-21 de abril de 2022, se dio a conocer la noticia del descubrimiento por parte de Maria Czepiel acerca de dos nuevas odas latinas de Garcilaso. Efectivamente, hasta entonces solo se conocían tres odas latinas: la I. «Ad Anthinium Thylesium Ode», «Uxore, natis, fratribus et solo»; la III. «Sedes ad cyprias Venus», editadas, estas últimas, según el testimonio de la copia no autógrafa contenida en XIII AA 63 de la Biblioteca Nacional de Nápoles. La Oda II. «Arcum quando adeo religionis et…», se editaba según el único testimonio que se conocía hasta la fecha: el ms. 5785, de la Biblioteca Nacional de España. Joseph Reed, investigador de la Universidad de Brown, perteneciente al proyecto PRONAPOLI, planteó en Studia Aurea (2021) posibles alternativas a las lecturas aceptadas. Pocos meses después se dio a conocer el nuevo testimonio: conservado el manuscrito entre los últimos folios en blanco de un ejemplar impreso titulado Doctissimorum nostra aetate Italorum epigrammata, publicado en París, por Nicolas le Riche, en 1547, el texto descubierto por Czepiel aporta un nuevo testimonio para las tres odas conocidas, además de las dos nuevas, una dedicada a Pietro Bembo y otra a Johan Alexander Brassicanus. El libro, editado por Jean de Gagny, es una antología en verso de poetas italianos de finales del siglo XV, como Flaminio, Molza, Navagero, Cotta, Lampridius y Sadoleto. Dicho ejemplar se encuentra en la Biblioteca Nacional de la República Checa. Además, el nuevo testimonio aporta algunas lecturas más fiables, como por ejemplo, recupera la línea 53 de “Sedes ad Cyprias” (véase la transcripción del manuscrito de la BNN en Pronapoli, con la marca del verso 53 que falta por medio de puntos discontinuos, ausente en el testimonio napolitano y por supuesto en su copia vaticana, a buen seguro de Angelo Colocci (Vat. Lat. 2836)
La edición digital
Por primera vez se ofrece aquí una edición crítica y anotada, con todos los avances de las humanidades digitales, de los textos de Garcilaso que participan con mayor o menor intensidad de esta influencia capital que constituyen los carmina de Horacio, por un lado, en las odas latinas, compuestas durante su época de exilio, que el poeta empleó para darse a conocer entre los poetas de Alemania e Italia, y por otro, en los textos castellanos en que después practicó ese horacianismo, no exento de eclecticismo, ensayado en lengua latina: como el poeta mismo explica en el soneto XXIV, su objetivo fue verter ese clasicismo en el seco cauce de la lengua castellana (véase el soneto XXIV), ya en el último año de su vida (salvo la Égloga II, compuesta entre el otoño de 1532 y la primavera de 1533, cuya influencia horaciana es de muy menor calado).
Se edita aquí la compleja Égloga II (con su estancia dedicada al beatus ille), y otras obras de factura más decididamente horaciana, como la Epístola a Boscán, la Elegía II, la Ode ad Florem Gnidi. Por lo que respecta a sus odas latinas, a las tres odas neolatinas conocidas del poeta, I Ad Antonium Thylesium Ode; II Garsiae Lasi Ode Ad Genesium Sepulvedam, III Sedes ad cyprias Venus, se han añadido las recientemente descubiertas por Czepiel, IV Intentos humilis, Bembe, sonus lyrae, y V Brasicane, meis iure sodalibus, en el nuevo manuscrito de factura alcalaína que comprende las cinco odas y ofrece un testimonio muy valioso del conjunto. El carácter multidisciplinar de nuestras indagaciones ha beneficiado también en gran medida la anotación de las fuentes en su variada extensión de influencias clásicas, neolatinas e italianas de obras que están en el centro de ese laboratorio de experimentación que fue la Nápoles renacentista. A la vez, se han podido fijar los textos latinos, en una edición por primera vez crítica de los mismos.